Este pueblo siempre ha confiado más en la memoria que en la historia. La memoria, como el fuego, es radiante e inmutable, mientras que la historia sirve solo para quienes pretenden manejarla, para quienes tratan de apagar la llama de la memoria con el fin de extinguir el peligroso fuego de la verdad.
Tened cuidado con esos hombres, pues son peligrosos e ignorantes, su falsa historia está escrita con la sangre de quienes podrían recordar y de quienes buscan la verdad.
Göbekli Tepe, por desgracia, ha escapado de nuestra memoria, solo queda confiar en el buen hacer de la gente que "maneja" la historia.
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